RESUMO
We considered a common research tool for understanding the mental models behind conservation decisions: cognitive mapping. Developed by cognitive psychologists, the elicitation of mental models with cognitive mapping has been used to understand soil management in Spain, invasive grass management in Australia, community forest management in the Bolivian Amazon, and small-scale fisheries access in Belize, among others. A generalized cognitive mapping process considers specific factors associated with the design, data-collection, data-analyses, and interpretation phases of research. We applied this tool in a study about the integration of social data in shoreline master plans of Washington State. Fourteen policy makers and managers (approximately 85% of the region's potential sample) were asked to identify the factors they considered when making their plans. Researchers coded these factors into mental-model objects and summarized mental-object frequency and co-occurrence trends. Although managers prioritized the perceived needs of social groups in their mental model of shoreline master plans, they focused specifically on tribal and private property rights, even though existing social data identified a diversity of interests around timber harvesting, tourism, and agriculture. Understanding their mental models allowed us to more effectively present this social data so that it could fit within their existing thoughts around planning. Although our case study provides a description of the cognition of a particular policy process, cognitive mapping can be used to understand cognitive processes that influence any conservation planning context.
Uso de Mapeo Cognitivo para Entender la Planeación de la Conservación Resumen Consideramos una herramienta común de investigación para entender los modelos mentales detrás de las decisiones de conservación: el mapeo cognitivo. Desarrollado por los psicólogos cognitivos, la obtención de los modelos mentales mediante el mapeo cognitivo se ha usado para entender el manejo del suelo en España, el manejo del pasto invasivo en Australia, el manejo de la comunidad del bosque en la Amazonía de Bolivia y el acceso a las pesquerías a pequeña escala en Belice, entre otros ejemplos. Un proceso de mapeo cognitivo generalizado considera los factores específicos asociados con las etapas del diseño, recolección de datos, análisis de datos e interpretación de la investigación. Aplicamos esta herramienta en un estudio sobre la integración de datos sociales en los planes de ordenación de la costa del Estado de Washington. Se les pidió a catorce formuladores de políticas y administradores (aproximadamente el 85% de la muestra potencial de la región) identificar los factores que consideran cuando formulan sus planes. Los investigadores codificaron estos factores en objetos de modelos mentales y resumieron las tendencias de frecuencia y coocurrencia mente-objeto. Aunque los administradores priorizaron las necesidades percibidas por los grupos sociales en su modelo mental de los planes de ordenación para la costa, se enfocaron específicamente en los derechos tribales y privados de propiedad, aunque los datos sociales en existencia identificaron una diversidad de intereses entorno a la extracción de madera, el turismo y la agricultura. El entendimiento de sus modelos mentales nos permitió presentar estos datos sociales de manera más efectiva de tal manera que pudiera tener cabida dentro de sus ideas actuales en torno a la planeación. Aunque nuestro estudio de caso proporciona una descripción de la cognición de un proceso particular de políticas, el mapeo cognitivo puede usarse para entender los procesos cognitivos que influyen sobre cualquier contexto de planeación de la conservación.
